Hoy me acorde de una foto que me trae muy buenos recuerdos,
esta foto fue en mi último día de prácticas, la verdad que ese día estaba muy
triste por tener que dejar la escuela, y me daba mucha pena… los niños y niñas
eran encantadores, las maestras divertidas, y aprendí muchísimo, muchas veces
me acuerdo de cómo me quejaba por tener que estar sola en la clase de bebes o
de los mayores, pero a día de hoy puedo decir que es de la mejor manera que se
tiene de aprender.
Es bueno que los primeros días te tengan “vigilada” ya que
llegas sin saber nada, no sabes dónde están las cosas y nunca está de más que
los primeros días te den unas pautas y que estén contigo acompañándote, ya que
muchas veces te sienten impotente cuando los niños lloran, ya que no sabes por
qué lloran: si están enfermos, si tienen hambre…
Esta foto demuestra mi alegría por haber escogido esta
profesión, una profesión tan satisfactoria y bonita. Los niños nos agradecen
todo, cada gesto de cariño, cada explicación…
Por eso debo decir que esta fue la mejor experiencia de mi
vida.
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